De vertedero a observatorio de aves

El proyecto Revergeo ha dado una nueva vida al vertedero de Tornos, Teruel, con la restauración ambiental del entorno próximo a la laguna de Gallocanta, dando ejemplo de cómo puede regenerarse una zona abocada a la contaminación para convertirla en un espacio natural abierto a la biodiversidad y la economía sostenible.

Planeta 2030

La Fundación ADRI Jiloca Gallocanta, SEO/BirdLife y el Ayuntamiento de Tornos han llevado a cabo El proyecto Revergeo, financiado con fondos del programa LEADER con el fin de mejorar el estado ecológico del espacio próximo a la laguna de Gallocanta.

Se han desarrollado varias acciones de restauración ambiental como la limpieza de residuos peligrosos y no peligrosos y el sellado del vertedero, así como se ha acondicionado el terreno para convertirlo en un nuevo observatorio de aves, fomentando el desarrollo local y el turismo sostenible.

El proyecto ha tenido como objetivo mejorar el estado de conservación de una zona próxima a la laguna de Gallocanta, evitando que los vertidos peligrosos del mismo continúen impactando de manera negativa sobre las cualidades biológicas, físicas y químicas de la cuenca hidrológica de laguna.

Las entidades han unido esfuerzos con el fin de poner en valor el espacio natural y promover así un turismo de calidad. El vertedero recibía todo tipo de residuos contaminantes, convirtiendo el lugar en un “colector de basura” de todo tipo que acababa contaminando la cuenca hidrológica de Gallocanta.

Observatorio de aves
Observatorio de aves Tornos

Destinado a la observación de la entrada y salida de grullas de la laguna de Gallocanta, sobre el vertedero se ha dispuesto un observatorio aprovechando una elevación natural del terreno y se han instalado una serie de paneles informativos, aparcabicis y una zona con sombra, en definitiva una zona acondicionada para que nunca más se echen escombros o basura que deben ir siempre al punto limpio.

Se da la circunstancia que los turistas de naturaleza que visitaban la Reserva Natural de la laguna de Gallocanta, usaban la parcela contigua al vertedero para observar el espectáculo de la entrada y salida de miles de grullas a la laguna, por ser un punto estratégico y al mismo tiempo tenían soportar la imagen de lavadoras, restos de obra, plásticos, ropa y hasta latas con aceite usado o aerosoles.

Con el proyecto se ha podido señalizar en la carretera la entrada a la zona de observación de grullas, y otras aves como el aguilucho lagunero, esmerejón, así como aves agrícolas y de la laguna mejorando la entrada a la Reserva Natural. De esta manera,l el municipio de Tornos se vuelca en la regeneración del paisaje y apuesta por el valor ecológico del ecosistema. Las casas rurales, hostales o restaurantes del municipio, pueden recomendar un nuevo punto de observación de aves en la laguna de Gallocanta con todas las garantías para sus clientes.